Literatura de subsistencia: La cordura se apodera de nosotros con la edad

La cordura se apodera de nosotros con la edad

El movimiento rectilíneo y uniforme de los cuerpos.
La materia zumbante del entorno.

Yo cocino mi arroz
y así es como todo se acomoda.

Guadalupe:
por las noches te veo desde el aire
mientras das vueltas de un lado al otro descalza,
acomodás las sábanas, hasta que te dormís.

Lo que pasa por dentro
está dibujando cautelosamente lo que va a pasar por fuera.
Esta mente ya no entiende lo que imagina, qué está viendo.

Canción:

Soy un niño de diez años
y camino con miedo entre los adultos armados.
Llevo una mochila con alimentos y ropa.
Soy un niño con la mente perlada
de bondad y violencia. Avanzo con estima,
atiendo a la tensión del arco y a la naturaleza
que nos vigila y muerde. Incrustadas en las comisuras de mi suela
hay piedras y palos y astillas
que se fijan a la bota de guerra.
Soy un niño que está trepando cercos
y cercos de ardor. El traspaso a la gruta de las bendiciones.
Las licencias del mundo adulto.
Pienso en mi madre,
pienso en mis hermanos,
pienso en la furia desatada aquel día en la granja.
Soy un niño de diez años
y recuerdo mis obligaciones en la ciudad
y ,auque no conozca, tengo miedo a los puertos.
El silencio, la pasión de los ciudadanos.
Todo en una caminata a oscuras.
La sangre viajando más rápido
pese a la lentitud del cuerpo.
Soy un niño de diez años
cruzando el arrollo sin descolgar
la mochila de mis hombros. He practicado
un duro entrenamiento por las siestas
que no me hace dudar.
Quise las espinas porque se adhieren mejor;
ahora soy sulfuro para los muertos.

Fin de la canción.
« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »